La energía hidroeléctrica se nos
presenta como limpia por instituciones y empresas que como Iberdrola
nos bombardean con el poco impacto de su producción y beneficios
(Iberdrola inrtroduce la hidroeléctrica en su 16 % de renovables que
produce (2010)). No precisa combustibles ni produce emisiones (sí al
construirlas, etc) pero sin embargo los impactos son por tod@s
conocidos, desde la inundación de grandes extensiones de terreno y
ecosistemas al impacto de la modificación del flujo en el medio
ambiente y también en las poblaciones dependientes. Al final del
siglo XX se habían construido unos 50,000 embalses alterando el
curso de casi todos los ríos del mundo. Además del impacto
ambiental, los embalses han afectado a entre 400 y 800 millones de
personas (muchos más los que no se consideran como tal pero que se
ven afectados) - 10% de la humanidad!
Pese al gran coste que supone la
construcción y pese a lo mucho que se carga al pueblo por su
construcción, los embalses siguen siendo una apuesta logística y
enérgetica de muchos gobiernos e instituciones y también de muchas
transnacionales. Entre ellos, empresas muy cercanas a nosotras como
el BBVA e Iberdrola. Ambas han participado en numerosos proyectos
hidroeléctricos y en la actualidad impulsan los proyectos más
discutidos del mundo: el embalse de Ilisu en el Kurdistán turco en
el caso del BBVA y en el de Belo Monte en la Amazonía brasileña en
el de Iberdrola.
En este día que se celebra en Bilbo,
en el Palacio Euskalduna la Conferencia Internacional Hydro 2012 por
la empresa HydroPower, queremos denunciar la promoción de esta forma
enérgetica a gran escala y sobre todo el papel que las grandes
transnacionales vascas tienen en este ámbito. HydroPower, cómo no,
menciona a Iberdrola, ya que según ella es la mayor empresa
inversora en hidroeléctrica con un presupuesto actual de 9
billones de euros en distintos proyectos. Por ello queremos
aprovechar la ocasión para exegir su retirada de los proyectos de
Ilisu y BeloMonte y la paralización de estos.
También nos queremos acordar de los
conflictos que esta energía suscita también aquí. Después de
Itoitz, el de Iesa es el más cercano y reciente. La población se
opone a su recrecimiento y ha conseguido parar los intentos, pero
también han sufrido una gran represión. La última el pasado 10 de
octubre cuando la policía cargó contra l@s vecin@s de Artieda:
para el recrecimiento precisan expropiar 60 hectáreas de tierras,
pero además les obligará a abandonar su pueblo. Como resultado
decenas de heridos.
El BBVA y la financiación de embalses
Además de la fabricación de armas y
muchos otros despropósitos medioambientales maquillados con mucha
desfachatez, el BBVA financia la construcción del embalse de Ilisu
en el Kurdistán turco, ya que desde el 2 Noviembre 2010 posee el
24,9% del banco turco Garantibank, único financiador en la
actualidad de este macro-embalse junto al también turco Akbank.
El proyecto de embalse de Ilisu fue
abandonado por financiadores, instituciones y gobiernos que lo
apoyaban en varias ocasiones quedándose finalmente el gobierno turco
como único impulsor y los bancos turcos Garantibank y Akbank como
únicos financiadores. En el 2001, la presión del movimiento social
consiguió que la británica Balfour Beatty y el gobierno británico
abandonaran el proyecto. Este hecho fue un hito del movimiento social
y ecologista internacional.
Pasaron años sin que el proyecto
avanzara para que lo retomaran bancos de Alemania, Austria y Suiza.
Pero en 2009 estos volvieron a retirar las garantías de crédito a
la exportación por incumplimiento de las condiciones ambientales y
sociales necesarias. Esa es la historia de rechazo internacional de
un proyecto inaceptable por lo que supone: la inundación de una
vasta área pero sobre todo de la milenaria ciudad de Hasankeyf
(12.000 años), crisol de civilizaciones pero además de gran
importancia para el pueblo Kurdo. Hasankeyf contempla 9 de los 10
criterios de la UNESCO para ser considerada Patrimonio de la
Humanidad.
La otra gran afección sería el efecto
en los países vecinos pues Ilisu se situaría al inicio del río
Tigris antes de su paso por Siria y de atravesar de norte a sur Iraq
para el que el caudal de este río es transcendental tanto en lo
humano como en lo ambiental. En este sentido, Ilisu supondría una
causa de tensión a añadir a una zona ya de por si muy volátil ya
que Ilisu cerraría el paso al gran Tigris que atraviesa todo Iraq, a
escasos kilómetros de la frontera con éste país y Siria. Turquía
no ha consultado su construcción con ninguno de los dos países
afectados.
Ilisu pertenece al GAP (Proyecto Gran
Anatolia) que contempla la construcción de 2000 embalses. De ellos
22 coincidirían con esta zona de Kurdistán, Batan, y de ellos 17 ya
están construidos. Esta es una zona en la que de 1984 a 2000 supuso
el desplazamiento de 3 millones de personas, la destrucción (parcial
o total) de 3000 pueblos y el aniquilamiento de más de 30.000
personas como resultado del conflicto étnico que sufre Kurdistán
desde hace décadas.
El embalse ya se ha iniciado y con
ello, la construcción de un lugar para la reubicación de la
población. Pero de los 78000 afectados por este embalse, muchos no
tendrían ninguna indemnización ni reubicación pues muchos viven en
cuevas (en Hasankeyf), o son nómadas (en el valle afectado) o no
tienen título de propiedad ni de casas ni de tierras.
Los grandes embalses han sido uno de
sus formas de lucro del BBVA a través del cobro de préstamos
sindicados. El BBVA financió la presa del Cajón en México, en el
estado de Nayarit, la más alta de su tipo, que además de los
impactos ambientales causados, supuso el desalojo de muchas
poblaciones; las represas de los Ríos Báker y Pascua en la
Patagonia chilena paralizados por la falta de un estudio de impacto
medio ambiental y que financió en 2008 por 400 millones de dólares,
en 2004 con 850 millones de dólares y en el 2003 con 2.330,36
millones de dólares; la Planta Hidroeléctrica Barra Grande en
Brasil con una evaluación de impacto ambiental fraudulenta ya que no
tiene en cuenta la inundación 8.138 ha de bosques primarios y
secundarios; la presa de Campos Novos, es la tercera presa más
grande del mundo de tipo CFRD, y la segunda más grande en Brasil que
desplazó a unas 3.000 personas y que ya sufrió un accidente al
ceder una de sus bases.
Iberdrola y los
embalses y el proyecto
Belo Monte
La energía hidráulica supuso el 20,8%
de toda la energía generada por el Iberdrola (2010).
Iberdrola cuenta nada menos que con 22
plantas hidroeléctricas en el estado español, de los cuales
remarcaremos los conflictos suscitados en el Sil (Galiza) y Cáceres.
Pero sin duda el mayor de los
conflictos que protagoniza es el mencionado de Belo Monte en el río
Xingú, uno de los mayores afluentes del Amazonas que de construirse
será el tercer mayor embalse del mundo (tras el de las Tres
Gargantas en China y el de Itaipú (frontera Brasil-Paraguay)). Este
además afectaría considerablemente una gran extensión de
ecosistemas prácticamente vírgenes, pueblos y culturas indígenas
que se hayan en pie por 23 años, antes de la Cumbre de Río del 92.
Su reserva causaría el desplazamiento de 50.000 indígenas.
Iberdrola a través de Neoenergía (de
la que posee el 39%) participó en un consorcio en el concurso de la
construcción de BeloMonte, pero el gobierno brasileño prefirió el
consorcio de empresas estatales brasileñas Norte Energia. Sin
embargo, Neoenergía (Iberdrola) se hizo con varios sub-contratas. El
pasado 29 de octubre trascendió que Neoenergia (Iberdrola) pretende
pasar del 10% actual al 20% del consorcio de Belo Monte.
En febrero 2011 un juez federal
paralizó la construcción de Belo Monte porque no cumplía
los 29 requisitos acordados y el 20 de agosto 2012
la justicia ordenó de nuevo su
paralización. Pero el gobierno brasileño, empeñado en una
mega-producción enérgetica que satisfaga los intereses corporativos
y la extracción y producc
ión industrial, la exportacion y el
convertir a Brasil en una potencia industrial, continúa declarándolo
de interés nacional invalidando la decisión tribunal.
La resistencia no cesa: tomas de la
zona de obras en junio y ahora de nuevo en octubre por indígenas,
corte del río para impedir la entrada de maquinaria en septiembre...
hasta los trabajadors se han rebelado!! A ello le corresponde una
represión con todo el aparato estatal. Y en el caso de la última
ocupación también una “audiencia de conciliación”.
Iberdrola a través de Neoenergia
cuenta con tres proyectos hidroeléctricos en marcha en Brasil y con
otros diez en proyecto. El Movimiento de l@s Afectad@s por los
Embalses de Brasil estima que los damnificados por los embalses en
Brasil (hasta 2004) superan el millón de personas. Por otro lado el
impacto ambiental ha sido enorme sumergiendo grandes superficies de
bosque, selva, que desde hace años defendemos por ser imprescindible
para el futuro del Planeta, por ser el pulmón del Planeta, en una
época marcada por el Cambio Climático en el que su conservación es
todavía más necesaria.